lunes, 11 de agosto de 2008

breve historia de un poster


El otro día hubo fiesta en casa de Alicia y Álex (qué raro). La fiesta iba a buen ritmo. Le costó arrancar, pero temazos como Pogo, We are your friends o Kids consiguieron poner al público en su sitio, es decir, la pista de baile. En un momento dado acabamos unos cuantos en la habitación de Álex haciéndonos fotos y subiendo a la escalera que tiene, que no sé todavía por qué.

Alicia entró en esa wg el invierno pasado. Yo y unos cuantos ayudamos a Alicia a hacer la mudanza. Ésa fue la primera vez que entré en la wg2000, que es como se llama. La casa es enorme y cuando digo enorme me refiero a gigantesca, solo decir que viven siete personas allí. Hay un pasillo kilométrico que une el salón con las habitaciones de los chicos, el baño y la cocina. La primera cosa en la que me fijé fue en su logitud, perfecto, hasta aquí todo normal. Lo segundo fue en un poster que colgaba de la puerta que daba al final del pasillo. Desde donde me encontraba se veía pequeñito, pero se podía saber lo que era. Se trataba de un poster de Fijiya & Miyagi, un grupo muy chulo que me enseñó Alicia y que tocaron en Berlín.
-¿quién vive en esa habitación?
-creo que un chico americano que se llama Michael.
Luego Michael resultó ser uno de esos americanos ultra frikis (en el buen sentido español del término, que si no se traumatiza el susodicho) sobre la música, el cine y todo lo que quieras relacionado con la cultura (aprender suajili está incluido en esa lista). También resultó ser una de las personas más memorables de mi estancia en Berlín. Michael ya se ha ido a los Estados Unidos. Pero ese poster seguía en la puerta.
Ahora esa habitación es de Álex, el cual no es en absoluto un personaje nuevo en esta historia berlinesa.

Álex estaba mirando sus regalos de cumpleaños. Nunca me podía haber imaginado lo mucho que le puede hacer feliz a alguien que una cartera tenga un bolsillo para las monedas, en serio. En ese momento de euforia vi el poster de nuevo. Recordé ese primer momento y todo lo que ha pasado desde entonces. No dudé en pedirle a Álex que si me podía quedar el poster.

Ahora el poster está en mi habitación. No sé si colgarlo o no. Sólo me quedan seis días aquí. Lo que si es seguro es que este poster se va conmigo a Madrid, auf jeden Fall.

A ese concierto fueron Michael y otros compañeros de piso de la wg2000, futuros compañeros de Alicia y futuros amigos nuestros. A ese concierto también fuimos Alicia y yo. En aquel concierto estuvimos todos juntos, aunque no lo supiéramos pues ni siquiera sabíamos de la existencia del otro.


Historias entrecruzadas en torno a un poster. Otro día contaré la historia que rodea el poster de Radiohead. Aunque siempre que lo digo nunca lo hago.

jueves, 7 de agosto de 2008

viaje al centro de la DDR

Ayer fui con unos amigos al sureste de Berlín, por la zona más pegada a Polonia.

Íbamos con las ideas claras, queríamos ver unas minas a cielo abierto y una biblioteca. Como véis todo en plan friki arquitectónico.

La mina nos costó encontrarla, pero mereció la pena. Subimos por una ladera y allí apareció. Todo lo que daba de sí nuestra vista, era mina. Nos hacía parecer minúsculos. Y no solo a nosotros, las máquinas encargadas de la estracción y del transporte del material (el objeto de nuestra visita) parecían enanísimas. Solo los aún más pequeños coches nos daban la referencia de la escala tan gigante de esas máquinas.

Para hacernos una idea todavía más exacta de esa escala fuimos a por la segunda visita. Se trataba de una de las máquinas-puente que vimos en la mina, pero reconvertida en museo y sobre la que se podía subir. Increíble. No te puedes hacer una idea de la locura que supone construir una cosa así. 500 metros de largo y 73 metros de alto. 50000 toneladas de carbón al día. Inabarcable.

Por último, la biblioteca. Ésta se encontraba en Cottbus, la ciudad más grande de la zona, hasta ahora todo eran típicos pueblecitos alemanes, con sus típicos malos humores alemanes, con su típico desconocimiento alemán de los alrededores, etc. La biblioteca se encontraba en la universidad, que mezclaba edificios hiper-modernos-de-cristal y típicas-edificaciones-muralistas-de-la-época-más-soviética. Nuestro edificio era de los primeros, construído por MVRDV y que soportó la admiración, previamente, y la crítica indiscriminada, después, del grupo de estudiantes de arquitectura que éramos. Cerveza y salchicha para pocer punto y final a la escapada.

Un viaje digno de ser recordado.






















··· de 7 a 17 y tiro porque me toca ···

viernes, 1 de agosto de 2008

mgmt

Ésta bien podría ser la canción del verano.





¡a disfrutar!, ¡que agosto ya está aquí!








17 días